El segundo álbum de los murcianos Neon Lights levanta una de las esquinas del sudario que había estado cubriendo buena parte de su producción musical anterior.
Con un título que hace pensar en un tema clásico de Bauhaus, A Slice of Life (autoeditado, 2018) llega cinco años después de su predecesor, Late (autoeditado, 2013). Ello no quiere decir que los componentes de Neon Lights hayan estado ociosos durante este tiempo y, así, entre ambos álbumes nos ofrecieron el EP The Blue Rider (autoeditado, 2015). Pero los años transcurridos desde este último trabajo nos habían hecho temer por la continuidad de la banda, especialmente si tenemos en cuenta que el año pasado fue tan aciago para los grupos de filiación oscura que ni October People ni Antiguo Régimen se encuentran ya entre nosotros.
No obstante, Neon Lights han despejado cualquier duda que pudiéramos albergar sobre su estado de forma al publicar A Slice of Life hace ya un par de meses. No se trata de un álbum que suponga una ruptura con su obra anterior pero ello no quiere decir que sea del todo continuista. En A Slice of Life encontraremos sonidos similares a los que pueblan los trabajos anteriores de la banda, con parecidos arreglos de guitarra como principal eje vertebrador de su propuesta. Sin embargo, a pesar de lo que podríamos pensar tras escuchar «Take Me» —que no solo abre el disco sino que fue su primer single de adelanto—, el talante del álbum es menos sombrío que el exhibido en trabajos anteriores. Prueba de ello es «The Sun Shines on Our Behalf», una canción de pop casi chispeante que por momentos recuerda a The Smiths y nos permite atisbar un reverso luminoso de Neon Lights, no del todo inédito pero rara vez tan presente. Como antídotos para estos rayos de sol encontraremos la muy gótica «Twirling the Twilight» y la mucho menos sombría «Never Wanted to Have a Proper Job» con su aire a Interpol.
No queda claro cuál sería la triunfadora de esta pugna no planteada entre las dos vertientes exhibidas por el quinteto murciano. A Slice of Life se nos muestra así como un interesante álbum, no exactamente esquizofrénico pero sí capaz de mostrar de manera patente la doble naturaleza presente en la intención de sus progenitores.
El próximo concierto de Neon Lights tendrá lugar con ocasión de la presentación en Madrid de A Slice of Life. La actuación tendrá lugar en el Moby Dick Club, donde contarán con la compañía de Noise Box: puedes adquirir tu entrada aquí.