La Lata de Zinc, el chigre cultural de Oviedo, organizó el pasado viernes 27 de abril una noche de punk y hardcore con La URSS, Cuchillo de Fuego, Sudor y Neura. Macarrismo aliñado con un buen chorro de glamur.
Accidente y Troika se cayeron del cartel a última hora por problemas en el aeropuerto de Barcelona. Calentando motores, empezaron los asturianos Neura, con su punk llegado desde el cercano Gijón. Los edita Pifia Records y, con su juventud, van sobrados de frescura y actitud.
Los que tienen ya unos cuantos kilómetros a sus espaldas son los toledanos Sudor. Eso es algo que se nota, más allá de las pintas a lo Joe Strummer de Héctor (guitarra y voz). Su concierto en la Lata de Zinc fue todo un recital de punk clásico e incontestable, durante el cual continuó el pogo y gente volando sobre las cabezas de la muy animada masa.
Desde Granada, con su producto cada vez más y mejor trabajado, La URSS eran, fácil, el grupo más esperado. Su música (y su merch) vende a nivel internacional. Y, si no, que se lo pregunten a Brian Baker, de Minor Threat y Bad Religion, quien en más de un festival ha lucido la camiseta de los andaluces con la cruz de Flamel. No es demasiado sencillo verlos en directo y eso ayuda al mito. Además, a Asturias acudían con trabajo recién sacado bajo el brazo: Nuevo Testamento (Humo, 2018), publicado por el mismo sello de Cuchillo de Fuego y de otros grupos como Balcanes, Fasenuova, Fee Reega y Pylar. Estuvieron soberbios, pese a que los más puristas le achacaron al líder la imitación casi permanente de Iggy Pop.

Cuchillo de Fuego se encargaron de cerrar una jornada en la que se encontraban ilustres como Pablo und Destruktion entre el público. También estrenando nuevo cedé, Megavedra (Humo, 2018), los de la ciudad del Lérez y el Estrella Park hicieron que a muchos se les olvidase que habían ido hasta allí para ver a La URSS. Su sonido es irresistible, cada vez más preciso y potente, ahora con Guille (ex Unicornibot) a la batería. De las letras poco hay que decir, Juanes pone a cien a cualquier auditorio. Y en cuanto a glamur, entre la Iguana Stooge y Pete Simonelli de Enablers, ahí anduvo la cosa.