Como parte de los deberes previos a nuestra asistencia al Empower Music Fest hemos escuchado el recién publicado primer trabajo de las madrileñas Patio Rosemary.
Fotografía: Irlanda Tambascio
El pasado mes de mayo el cuarteto madrileño Patio Rosemary resultó ganador del concurso Lanzadera, una de las iniciativas llevadas a cabo por el proyecto Empower Music para combatir la desigualdad de género en el mundo de la música. El apetitoso primer premio de este concurso consistía en sendas actuaciones en los festivales Sonorama Ribera y Empower Music Fest, además de la grabación de un EP en Anti Studio.
No tengo del todo claro si el debut homónimo Patio Rosemary (autoeditado, 2018) publicado hace unas semanas se trata de este EP o si consiste en una primera entrega de lo que será la obra completa. En cualquier caso, la brevedad de este pequeño disco no supone un impedimento para el disfrute de las dos canciones que lo componen. Tanto la rockera «Psycho Stalker» como una «Calm Comes» de explicativo título ofrecen sabor a rock alternativo con aroma a los años noventa del pasado siglo, recordándonos a propuestas foráneas como Sleater-Kinney o The Breeders, sin olvidar bandas nacionales como Dover. Las dos facetas exhibidas en Patio Rosemary hacen que funcione como un buen punto de entrada para comenzar a descubrir una banda a la que aún debe quedarle mucho por decir. Y para los aficionados a la afectación hipster, esta puede ser una buena ocasión para poder referirse dentro de un tiempo a esa maqueta que era mejor que el disco. O simplemente para rebatir a un hipotético interlocutor con un sonoro «sí, pero yo las vi primero».
Hoy viernes 30 de septiembre tendremos ocasión de ver a Patio Rosemary en directo, durante la primera jornada del Empower Music Fest celebrado en Fuenlabrada (Madrid). La entrada es gratuita aunque los cuatro mil abonos puestos a disposición del público hace tiempo que han volado.
