Tras un breve descanso, el dúo madrileño Duerme Simón vuelve a escena con «La ingravidez» y «Sed animal», los dos primeros adelantos de su inminente LP.
Fotografía: Antonio Montesinos
Tres años han pasado desde que se publicara Bendita valentía (autoeditado, 2016), único LP de Duerme Simón hasta la fecha. Un disco lleno de sonidos clásicos con unas armonías cuidadas e instrumentalmente bien compactadas que contó con la producción de Txarlie Solano (Mäbu, Rayden). No había mucho espacio en el álbum para la electrónica ni otra clase de sonidos etéreos que no obstante, si parecen haber aflorado en esta segunda etapa de vida del grupo.
«La ingravidez», primero de los dos singles de adelanto del que será su segundo larga duración, se estrenó el pasado 7 de junio y contó con un videoclip de presentación magistralmente rodado por Ana de Nevado y Carlos Guijarro —de Rosas i Cocos— y que muestra una historia digna de cualquier capítulo de Stranger Things. La letra habla de la dualidad que muchas veces experimentamos en nuestro interior a la hora de ser o actuar, y de las muchas personalidades y vidas que podemos experimentar dentro de nosotros. A destacar el riff inicial de la guitarra de Álvaro Molinillo, que simula el sonido de un sitar y que se repite después de cada estribillo durante el resto de la canción.
Apenas tres semanas después vio la luz su segundo single «Sed animal», que continúa con la estética pop y electrónica de su predecesora pero incorpora unos sonidos menos marcados y más psicodélicos donde los sintes de Virginia Montaño se hacen mucho más presentes que en «La ingravidez». Su mensaje es de lo más actual y habla del desafortunado enganche del ser humano con la tecnología y las redes sociales, que nos exigen mostrar una vida perfecta ante el resto de la sociedad.
Tanto Virginia (voz y teclados) como Álvaro (guitarras y producción) han alcanzado una madurez personal y musical que los ha llevado a una producción mucho más ambiciosa con una electrónica más presente y unas melodías mucho más potentes y bailables gracias a unas composiciones más variadas y menos clásicas que las de Bendita valentía, pero sin descuidar a la vez el protagonismo de la voz de Virginia, marca del dúo madrileño.
Falta ver si el segundo LP de Duerme Simón cumple con las expectativas creadas por estas dos canciones y se convierte en uno de los discos de este 2019, pero para eso habrá que esperar a su lanzamiento en septiembre.