Con motivo de la publicación de Enola nos reunimos con The Levitants para charlar de lo divino, lo humano y de Kirguistan.
En primer lugar contadnos quiénes sois The Levitants, qué hacéis y cómo habéis adquirido el don de levitar.
The Levitants somos las tres patas de ese banco que todo el mundo cree que no se va a mantener y milagrosamente flota sorprendiendo a todos. Juan toca los sintes, Dani la batería y Sergio vocea y toca la guitarra.
Dos años han pasado desde «Telescape» hasta la publicación de Enola [Subterfuge Records, 2019]. ¿Qué ha ocurrido en este tiempo?
En un principio no sabíamos que íbamos a hacer, si grabar un LP o algo más corto, pero sí teníamos claro que «Telescape» había continuado la línea que marcamos con Coimbra [autoeditado, 2016] y queríamos enseñárselo al mundo. Luego grabamos Enola y sabíamos que «Telescape» tenía su lugar en medio de todo.
¿Cómo ha sido la experiencia de grabar con Javier Nieto?
Javi es uno de los mejores técnicos de España. Siempre decimos que si estuviese en Madrid en vez de en Valladolid sería uno de los técnicos más solicitados. Sabe leerte la mente y traducir las mierdas que queremos decir los músicos y no sabemos explicar. Un genio.
«Coimbra» es un tema que nos ha dado tanto que sentíamos que estábamos en deuda con él.
En «Hay alguien ahí» y «Enola (M de llorar)» os atrevéis tímidamente con el castellano. ¿Estáis valorando la posibilidad de cambiar el idioma de algunas de vuestras futuras canciones?
En «Hay alguien ahí» y en «Suicide» hay dos partes en castellano. Ambas surgieron de manera muy natural y por eso acabaron tal cual en el disco. No nos ponemos barreras ni límites, si supiésemos catalán o chino os aseguramos que algún verso o canción completa caería. Nos dejamos fluir.
Habéis rescatado «Coimbra», tema que ya había pasado por una revisión en forma de remezcla. ¿Se trata de vuestro tema fetiche u os resulta difícil renunciar a ella?
Es un tema que nos ha dado tanto que sentíamos que estábamos en deuda con él, por eso decidimos incluirlo en Enola.
¿Cómo surgió la colaboración con Raúl Allén en el videoclip animado de «From the Other Side (Driving)»?
Empezamos a hablar de esta colaboración antes de tener grabado nada. Le enseñamos la demo del tema y le encantó. Después nos liamos y acabamos haciendo otros dos vídeos con él: «Red Lines» y «Suicide». Un honor contar en nuestra ciudad con un artista de su talla.
Esperamos poder girar por Kirguistan y descubrir el misterioso origen del éxito por nosotros mismos.
Contadnos por favor lo de vuestro inesperado éxito en Kirguistan.
[Risas] No nos dimos cuenta de ello hasta que nuestra amiga Aurora nos dijo que si habíamos visto los shazams que llevaba «On the Top» un tema de nuestros primeros tiempos, al comprobarlo vimos que tenia más de 60.000 shazams, una cifra disparatada para una banda pequeña. Investigando, la gente de Shazam nos dijeron que el epicentro de las búsquedas se encontraban en ese punto y otros de habla rusa… esperamos poder girar por allí y descubrir el misterioso origen por nosotros mismos.
¿Qué nos podéis contar de la escena musical vallisoletana?
Pues que es una de las más prolíficas y variadas de este país: Arizona Baby, El Meister, Tuxedo, My Friendly Ghost, Erik Urano, Kiko Sumillera, José Carreño… Un lujo de amigos y de artistas.
El 24 de octubre volvéis a Madrid por la puerta grande, nada menos que en la sala el Sol, ¿qué veremos sobre el escenario esa noche?
Practicaremos un ejercicio de levitación masiva, creemos que ese día podremos entrar en el libro Guinness de los récords.
