El sábado 15 de abril regresamos a Wurlitzer Ballroom para escuchar lo nuevo de Sistema de Entretenimiento, escoltados por Pedraxe.
Sábado de resurrección cercano a Cibeles aderezado por Andy y Lucas y Carlos Baute. Mientras, a pocos metros, como si de una distopía se tratase, los rebeldes se arremolinan frente a un local sin nombre. Todos sabemos que se trata de la Wurlitzer Ballroom, pero fuera no hay más señal que la cola de espera y el cartel colgado de no hay entradas. La revolución está a pocos minutos de personarse en las figuras de Pedraxe y Sistema de Entretenimiento. Sound Isidro, si el santo levantase la cabeza…
Como no fueras puntual, estabas relegado a ser vecino de la mesa de merchandising al final del pasillo. Desde la apertura inicial de puertas, el público fue apelmazándose dispuesto a ser parte del movimiento que se venía. Pedraxe, los teloneros, no se hicieron esperar y fueron calentando los motores de la hoguera final. Aún no nos hemos repuesto de esa mezcla entre Guitar Hero, autotune y opening de manga. Cambios generacionales, supongo.
Con el sudor empezando a formarse como una segunda piel, subieron prestos Sistema de Entretenimiento. El trío barcelonés había publicado LP homónimo el pasado año y las ganas de encontrarnos ante su propuesta arcade punk no podía ser mayor. ¿Qué decir? Sesenta minutos de intercambio de golpes con los que abatir al adversario que sostenga que cualquier tiempo pasado fue mejor. Un club de la lucha improvisado en el que los pogos llegaban hasta la quinta fila. Un ejercicio de liberación mental y física. Sí, Sistema de Entretenimiento beben de los ochenta nacionales (imposible no creerlo mientras se oyen los primeros acordes de canciones como «Su cuerpo está a punto de explotar» o «Mitad humano y robot») pero han sido capaces de añadirle temática pop de actualidad («Ranma», «Guerrera Luna», «Urotsukidoji») e incluso manejarse con la crítica política desde su atalaya robótico-distópica («Creo que prefieren vernos morir», «Miedo»). Sus melodías permanecen en tu cerebelo y funcionan como regeneradoras de energía vital en el videojuego de tu vida. Y durante una hora, Sistema de Entretenimiento te hicieron olvidarte de lo demás y sudar como un matado de gimnasio.